Una de las misiones que tenemos como docentes es incitar a nuestros alumnos a preocuparse por el futuro del planeta, a crear estudiantes (futuros ciudadanos) responsables con el medio ambiente. En el presente texto te brindamos información que llevará a tus alumnos a concientizar sobre el cuidado ambiental.
A nivel mundial, la educación ambiental surgió hace 5 décadas, su objetivo fue abordar la dimensión de la problemática ecológica. Tuvo sus inicios luego de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente Humano celebrada en Estocolmo en 1972, y en concreto, a partir de la Conferencia Intergubernamental de Educación Ambiental llevada a cabo en Tbilisi, Georgia, en 1977.
En México, la política ambiental aparece 10 años después y se institucionaliza en el Plan Nacional de Desarrollo 1983-1988 por medio del decreto al artículo 5º en 1986, en este se solicita a la Secretaría de Educación Pública (SEP) adoptar las medidas pertinentes para iniciar una pedagogía ecológica formal de alcance nacional. Hoy en día, tales determinaciones continúan vigentes.
No obstante, la formación y concientización a los alumnos, acerca del cuidado al medio ambiente, solo aparece cuando se tiene la efeméride del Día Mundial del Medio Ambiente, el Día Mundial del Reciclaje, entre otras.
Hoy en día, la concientización debe hacer más eco en los estudiantes, sobre todo en niveles básicos, ya que son ellos quienes podrán impulsar un cambio efectivo entre sus pares generacionales.
Hábitos dentro y fuera del aula
Los hábitos son actividades cotidianas que forman parte del día a día, aquellos generadores de estabilidad en todo lo realizado por el hombre. En el caso del medio ambiente, estos se deben desarrollar para mantener las condiciones ideales del lugar que habitamos, mismos que inciden directamente en el hogar de todos: el planeta.
Los hábitos inician en el hogar y conforme crecemos, estos se amplían generando nuevos. Y es aquí el primer punto de contacto con las nuevas generaciones, en donde debemos enfocarnos para sembrar la responsabilidad del cuidado al medio ambiente.
Dejar tareas de cuidado ambiental para desarrollar en casa y realizar charlas con los padres para impulsar estas actividades, puede ser el inicio para la formación del hábito del cuidado a los recursos naturales.
Como primer ejercicio del hogar al aula, es la separación de la basura. En el país, la Ciudad de México y el Estado de México son las primeras dos entidades que generan mayor cantidad de residuos, la primera 9552 toneladas, y la segunda 16,739 toneladas por día.
Sin embargo, 46.42% de los desechos que se generan en México son orgánicos, es decir se pueden aprovechar y alargar su vida útil. Por ello, uno de los primeros hábitos a mantener tanto en el aula como en el hogar, es la separación de los residuos para mejorar el aprovechamiento de los desechos.
El aula es el espacio donde pasan mayor parte del tiempo los alumnos, y es el lugar donde ellos son responsables de su ambiente. Como docente, tú eres el agricultor de la semilla ambiental, con tus cuidados y pláticas, los estudiantes desarrollarán una conciencia para cuidar del lugar en donde se encuentran.
Para empezar, con el reconocimiento de las condiciones actuales del ambiente en los más pequeños, te proponemos estimular el concepto del entorno a sus habitantes, es decir, la asociación de todos los que utilizamos el planeta para vivir: animales, plantas, ríos, océanos, humanos.
Posteriormente, será necesario comenzar con los hábitos, identificar el lugar donde se colocan los residuos y la importancia de ahorrar recursos a la hora de manipularlos como lo es el agua.
En niños de niveles como primaria baja, la lluvia de ideas acerca de los hábitos que tienen en casa para cuidar el medio ambiente será el indicador para saber si hay un fomento desde el hogar para cuidar el ambiente o será necesario comenzar a impulsarlo.